En un pintoresco lugar, rodeados de aparejos y antigüedades que el anfitrión ha ido recogiendo a lo largo de los años, y artilugios y maquinaria de agricultura que él mismo ha diseñado, hemos construido este fin de semana un domo de 5 metros de diámetro, que servirá como cubierta de invierno para la piscina circular de impresionantes vistas que corona la montaña de olivos.
Gracias a tod@s por participar y gracias a Jesús, por su cariño y generosidad. ¡suerte con vuestros proyectos geodésicos!