Para evitar tener problemas con la lluvia en el domo, es muy importante, entre otras cosas, haber preparado bien los tableros antes de su colocación, protegiéndolos con una membrana acrílica o similar, de lo contrario, es cuestión de tiempo que el agua penetre dentro del domo y una vez que esto sucede, es mucho más laborioso reparar los daños, pues habría que sanear y empezar de nuevo.

A pesar de esta advertencia, muchas veces, para ahorrar tiempo o dinero, se pintan los tableros sin antes haberlos protegido y es seguro que más adelante nos arrepintiremos de no haberlo hecho en su momento. Mi recomendación es nunca saltarse los pasos necesarios, con el tiempo lo agradeceremos. Fijáos en las fotos que os muestro de la cubierta de un domo en la que no se cuidaron estos aspectos.

La impermeabilización de un domo es tal vez la fase más delicada de todo el proceso, pues si no se realiza a la perfección, tened por seguro que por cualquier pequeño poro que os hayáis dejado sin cubrir, el agua acabará pasando por ahí, sin ninguna duda. Por esto recomiendo, que si no eres un experto en impermeabilización, se la encargues a algún profesional o, al menos, te asesores bien y lo lleves a cabo con paciencia, sin prisas y cuidando el trabajo al milímetro.

Tampoco hay que olvidar que casi cualquier material que utilicemos para la cubierta y que estará tan expuesto a la intemperie, necesita un mantenimiento periódico para evitar que esto suceda.